Reina, madre y estadista. Mariana de Austria y el gobierno de España
Cuando en 1665 falleció Felipe IV, su heredero, Carlos II, tenía tres años. La crisis dinástica que se abatió sobre España se sumaba a décadas de inmensos esfuerzos militares que habían dejado una Monarquía exhausta, prácticamente en bancarrota, con las fronteras vulnerables y un ejército diezmado. En Madre, reina y estadista. Mariana de Austria y el gobierno de España se retoma esta cuestión y su protagonista emerge como una figura sobresaliente tanto en la corte madrileña como en la escena internacional, mientras que sus principales colaboradores secretarios, ministros y diplomáticos a los que hasta ahora no se ha prestado la debida atención ocupan el lugar que les corresponde en la historia. Silvia Z. Mitchell ofrece un retrato de la regencia (1665-1675) lleno de matices y analiza el papel de Mariana como reina madre, oponiéndose a la percepción generalizada que se tiene de ella como una mujer débil, fácilmente manipulable y demasiado joven para gobernar.