Pablo Picasso, Paul Eluard. Una amistad sublime
En 1935, Paul Eluard pasa a formar parte del círculo más íntimo de Picasso. El poeta y el artista coinciden en el terreno del arte y la creación, así como en la misma orientación política. Eluard y Picasso conocieron y experimentaron la intensa interrelación entre la pintura y la poesía, la creación y el mundo, la historia y la sociedad. Y lograron preservar "la dura necesidad de durar" de su sublime amistad.