La Real y Americana Orden de Isabel la Católica (1815-2015)
La Real Orden de Isabel la Católica es de facto la primera en la jerarquía de las Órdenes civiles españolas -apenas se conceden collares del Toisón de Oro ni cruces de la Orden de Carlos III-, porque está muy difundida en España y en el resto del mundo, y porque por su carácter de instrumento de las relaciones internacionales goza de un gran prestigio internacional. Un prestigio que es mucho mayor en el ámbito en el que nació en 1815, es decir en los países iberoamericanos y demás del mundo hispánico, en los que apenas ha habido en la última centuria un solo presidente ni un solo mandatario que no haya recibido sus insignias. Se trata, pues, de un premio estatal de gran raigambre histórica, y el de mayor difusión y prestigio internacional.