El dibujo del retrato
El rostro se caracteriza por su especial expresividad, y por ello es una parte muy importante de la composición. Para poder dibujarlo correctamente se requieren muchas nociones preliminares. Se han de tener claros el método de medición, las reglas de la perspectiva y las sutilezas del dibujo de formas sencillas. Un desafío particular lo constituye, junto con el conocimiento y la aplicación de las reglas, la captación y la reproducción de los rasgos del carácter. La larga experiencia de András Szunyoghy como artista y docente hace de él una persona especialmente indicada para compilar las reglas básicas para aprender este arte. Este volumen ofrece el apoyo necesario tanto a quienes se inician en esta disciplina como a los que ya tienen conocimientos avanzados.